Fue en el sur de Francia: la inspiración para el evento fue María Antonieta (y el periodo revolucionario), el primer ícono de moda de la historia y es precisamente este motivo el que su Majestad la reina del Pop eligió para disfrazarse.
Everyone who is anyone en la industria de la música y la moda estuvo presente. Desde artistas, bailarines, hasta personajes como modelos, diseñadores y fotógrafos entre los cuales se encontraban Jon Kortajarena, Riccardo Tisci, y Steven Klein; todos caracterizados con motivos de la Révolution Française.
Todo en el cumpleaños de M-dolla, como se hace llamar, fue ultra chic. Desde los invitados, el setting, y los vestuarios. Incluso la comida, que en su mayoría fueron postres de Ladurée (incluído el pastel que Madonna se encargó de soplar cuando se le cantaron las mañanitas).
Sin duda Madonna supo como celebrar su 55 aniversario. Todos quisieramos celebrar así.